El lomito es una de las piezas más valoradas del cerdo ibérico. Se elabora con la presa entraña, una pieza que se encuentra junto a la paleta, forma parte del cabecero del lomo y pesa unos 500 gramos y su morfología es ovalada. La principal característica es su contenido en grasa intermuscular o infiltración, un alto contenido en ácido oleico que es ideal para la salud. Esta peculiaridad también participa en su aspecto marmóreo, sabor intenso, jugoso y sabroso.
Para la elaboración del lomito ibérico seguimos un procedimiento cuidado, aliñando a base de pimentón de La Vera, ajo y sal. Recetas ancestrales de Extremadura que se han transmitido cariñosamente de generación en generación.
Nuestros mejores profesionales se encargan de que la pieza siga un largo y cuidado proceso de curación en condiciones óptimas de temperatura y humedad. La producción del lomito es muy limitada, ya que de cada cerdo ibérico sólo se obtienen dos pequeñas piezas.
Este manjar debe ser degustado de la forma en que merece. Invitamos a cortarlo muy fino y dejarlo a temperatura ambiente para que la grasa se atempere y colabore así en la untuosidad, una experiencia de textura y sabor, una fascinante sorpresa para el paladar.
¿Te atreves a soñar?